El Contrato de Seguro, te contamos qué es, exactamente - Privat asesoramiento
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El Contrato de Seguro, te contamos qué es, exactamente

El Contrato de Seguro, te contamos qué es, exactamente

Privat Asesoramiento Correduría de Seguros S.L
Passeig de Gràcia, 101, 3º3ª – Barcelona
Teléfono: 934457500

En los contratos de los seguros las reglas suelen ser muy claras. Pero a veces, por falta de conocimiento de los términos jurídicos, pueden aparecer problemas al interpretarlo. Por eso es importante saber de antemano y entender tu póliza y los derechos que te amparan a la hora de contratarla.

¿Qué es un Contrato de Seguro?

Como cualquier instrumento de este tipo, se trata de un documento legal que pone de manifiesto un acuerdo entre partes. A través de él, una persona da su consentimiento y conviene el servicio con la aseguradora. Esta se obliga a resarcir un daño o pagar una suma de dinero a la otra parte si ocurre y se verifica que existe una eventualidad prevista en el acuerdo. A cambio de cubrir estas situaciones, se paga una prima periódica.

Las Partes

En el contrato de un seguro, las partes son el asegurador, el asegurado y el tomador. Cada uno tiene sus propios derechos y obligaciones.

El primero es la persona jurídica, que asume los riesgos ajenos y que debe restituir la suma que corresponda por el daño que le ocurra al interés resguardado, en el marco de lo estipulado en el contrato. En general, a las aseguradoras se les exige una serie de formalidades jurídicas y económicas. Entre ellas, deben estar registradas y haber sido aprobadas por la Administración Pública para actuar como tales.

Por otro lado, el asegurado es el titular del interés que se encuentra expuesto al riesgo por el que se formula el acuerdo. También existe la figura del tomador que puede ser una persona natural o jurídica que suscribe la póliza por cuenta propia o de un tercero y que abona la cuota. El tomador y el asegurado pueden ser o no una misma persona.

En el contrato se fijan los derechos y compromisos que corresponden a cada una de las partes que quedan perfeccionados a través del consentimiento, que es la firma del mismo.

¿Qué es una Póliza?

Es el documento que formaliza el acuerdo entre las partes y en él constan los derechos y las obligaciones. Como mínimo, siempre debe contener los nombres y domicilios de las partes, la designación del interés asegurado y la naturaleza de los riesgos garantizados. También debe incluir el momento de inicio y duración de la misma, el importe de la garantía, la prima y otras cláusulas particulares.

¿Qué se debe saber antes de firmar?

La entidad aseguradora tiene la obligación de entregar un documento con información clara y sencilla respecto al servicio que se va a acordar. Lo importante es que se explique el contenido del acuerdo de manera transparente.

Estos documentos suelen incluir el número de autorización de la empresa, un resumen de la cobertura del seguro donde queden claros los riesgos asegurados y excluidos, así como las restricciones de la póliza. También debe expresar el ámbito geográfico de aplicación, la duración del contrato y las formas de rescisión. Otro punto a tener en cuenta es saber con claridad cuáles son las coberturas del contrato para poder aprovechar todas sus prestaciones.

Por ejemplo, en el caso de los seguros de coche, hay empresas que incluyen servicios de asistencia en carretera, vehículo de sustitución o facilidades en el pago. Tener en cuenta estas variables permitirá aprovechar de forma integral las prestaciones adicionales de la póliza y ahorrar tiempo y dinero.

La información es fundamental

Como se ha mencionado al principio, los inconvenientes entre las partes con las pólizas de seguro suelen ocasionarse por dificultades en la interpretación o falta de información. Lo imprescindible es que nunca queden puntos sin aclarar.

En los contratos de los seguros las reglas suelen ser muy claras. Pero a veces, por falta de conocimiento de los términos jurídicos, pueden aparecer problemas al interpretarlo. Por eso es importante saber de antemano y entender tu póliza y los derechos que te amparan a la hora de contratarla.

¿Qué es un Contrato de Seguro?

Como cualquier instrumento de este tipo, se trata de un documento legal que pone de manifiesto un acuerdo entre partes. A través de él, una persona da su consentimiento y conviene el servicio con la aseguradora. Esta se obliga a resarcir un daño o pagar una suma de dinero a la otra parte si ocurre y se verifica que existe una eventualidad prevista en el acuerdo. A cambio de cubrir estas situaciones, se paga una prima periódica.

Las Partes

En el contrato de un seguro, las partes son el asegurador, el asegurado y el tomador. Cada uno tiene sus propios derechos y obligaciones.

El primero es la persona jurídica, que asume los riesgos ajenos y que debe restituir la suma que corresponda por el daño que le ocurra al interés resguardado, en el marco de lo estipulado en el contrato. En general, a las aseguradoras se les exige una serie de formalidades jurídicas y económicas. Entre ellas, deben estar registradas y haber sido aprobadas por la Administración Pública para actuar como tales.

Por otro lado, el asegurado es el titular del interés que se encuentra expuesto al riesgo por el que se formula el acuerdo. También existe la figura del tomador que puede ser una persona natural o jurídica que suscribe la póliza por cuenta propia o de un tercero y que abona la cuota. El tomador y el asegurado pueden ser o no una misma persona.

En el contrato se fijan los derechos y compromisos que corresponden a cada una de las partes que quedan perfeccionados a través del consentimiento, que es la firma del mismo.

¿Qué es una Póliza?

Es el documento que formaliza el acuerdo entre las partes y en él constan los derechos y las obligaciones. Como mínimo, siempre debe contener los nombres y domicilios de las partes, la designación del interés asegurado y la naturaleza de los riesgos garantizados. También debe incluir el momento de inicio y duración de la misma, el importe de la garantía, la prima y otras cláusulas particulares.

¿Qué se debe saber antes de firmar?

La entidad aseguradora tiene la obligación de entregar un documento con información clara y sencilla respecto al servicio que se va a acordar. Lo importante es que se explique el contenido del acuerdo de manera transparente.

Estos documentos suelen incluir el número de autorización de la empresa, un resumen de la cobertura del seguro donde queden claros los riesgos asegurados y excluidos, así como las restricciones de la póliza. También debe expresar el ámbito geográfico de aplicación, la duración del contrato y las formas de rescisión. Otro punto a tener en cuenta es saber con claridad cuáles son las coberturas del contrato para poder aprovechar todas sus prestaciones.

Por ejemplo, en el caso de los seguros de coche, hay empresas que incluyen servicios de asistencia en carretera, vehículo de sustitución o facilidades en el pago. Tener en cuenta estas variables permitirá aprovechar de forma integral las prestaciones adicionales de la póliza y ahorrar tiempo y dinero.

La información es fundamental

Como se ha mencionado al principio, los inconvenientes entre las partes con las pólizas de seguro suelen ocasionarse por dificultades en la interpretación o falta de información. Lo imprescindible es que nunca queden puntos sin aclarar.

Es fundamental leer las condiciones del contrato y, en caso de dudas, solicitar ayuda de un profesional para interpretarlo adecuadamente, aunque la propia aseguradora debería ofrecer toda la información necesaria.

Privat Asesoramiento Correduría de Seguros S.L
Passeig de Gràcia, 101, 3º3ª – Barcelona
Teléfono: 934457500